México ya entró a la era de la irradiación como tratamiento de poscosecha a través del uso del cobalto 60, lo cual permite al país exportar frutas frescas que no tenían acceso al mercado de Estados Unidos, informó la Sagarpa.

Al participar en el marco de la 32 Reunión Anual de la Organización Norteamericana de Protección a las Plantas (NAPPO), el titular de la Sagarpa, Alberto Cárdenas Jiménez, explicó las ventajas del uso de la irradiación en frutas tropicales.

“Es una ventana de oportunidad para hacer más competitiva nuestra agricultura, especialmente, la que se destina al comercio exterior”, indicó el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).

Informó que la semana pasada se envió el primer embarque de guayabas hacia Estados Unidos, producción mexicana que se presentará en la exposición de frutas frescas más importantes del mundo y que en esta ocasión se realiza en Orlando, Florida.

Dijo que la utilización del cobalto 60 también permitirá exportar, por primera vez al mercado de Estados Unidos, el mango manila, ya que el tratamiento de agua caliente que se aplica para las variedades que sí la resisten, no era compatible con la delicadeza de la piel y de la pulpa de este alimento.

“Los primeros embarques se enviarán en el transcurso del próximo mes”, aseguró Cárdenas Jiménez.

Puntualizó que la Sagarpa ya inició los trámites para incluir en la lista de productos elegibles por el gobierno de Estados Unidos a otras frutas mexicanas como el zapote, el mamey y la guanábana.
Explicó que la irradiación ha sido aceptada como un tratamiento alimentario por autoridades sanitarias de México, Estados Unidos y Canadá.

Al dirigirse a expertos, científicos, productores, empresarios y organizaciones vinculadas con las actividades de importación y exportación de alimentos reunidos, resaltó que “en México hemos asumido un compromiso ineludible con las buenas prácticas agrícolas y con la inocuidad alimentaria”.

Anunció que el gobierno federal destina 400 millones de dólares para llevar a cabo diversas campañas sanitarias, lo que ha permitido mantener a México libre de la mosca del Mediterráneo.

Fuente: Notimex, 27/10/2008

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